Una biodiversa
exposici�n
1.
�Abeja obrera de Trigona fulviventris (M�ul
Kaab)�
Regi�n de la Reserva de la Bi�sfera de los Petenes, 2016
Autor: Pablo Hern�ndez Bahena
En la Pen�nsula de Yucat�n se tiene reportada la presencia de 19
especies de las 46 existentes en M�xico. La abundancia y diversidad de especies
de abejas sin aguij�n se encuentra amenazada principalmente por la
deforestaci�n, la expansi�n de la agricultura, la ganader�a y el uso de
pesticidas.
La meliponicultura es una actividad que est� presente en un grupo
reducido de comunidades, 35% del total de 17 aleda�as a la Reserva de la
Bi�sfera de Los Petenes y ha sido poco estudiada en Campeche. La cr�a de la abeja
sin aguij�n es una actividad ancestral en v�as de desaparici�n en la reserva.
Dada su importancia en la estrategia de vida familiar y para procurar la
conservaci�n de la diversidad de especies de abejas nativas, el grupo de
Estudios Socioambientales y Gesti�n Territorial investiga sobre la situaci�n y
las perspectivas de la meliponicultura en la zona.
2.
�Reyna y abejas obreras de Frieseomelitta
nigra (Sak xik)�
Alrededores de ECOSUR-Campeche, 2017
Autor: Pablo Hern�ndez Bahena
El principal servicio ambiental de las abejas sin aguij�n es la
polinizaci�n de la vegetaci�n natural y de cultivos. Los antiguos mayas
heredaron conocimientos para la cr�a y manejo de la abeja sin aguij�n Ko'olel
kaab (Melipona beecheii) de la cual se obtiene miel, polen y
cerumen. Actualmente, es posible la pr�ctica de la meliponicultura con otras
especies de abejas sin aguij�n como la Sak xik (Frieseomelitta nigra).
3.
�Tok�a�aban� Chromolaena odorata
(Asteraceae)
Sendero de acceso a ECOSUR-Campeche, 2017
Autora: Diana del Rosario Cahuich Campos
Arbusto que crece de manera silvestre en el sendero de acceso a
las instalaciones de ECOSUR-Unidad Campeche. Fue identificada por expertos en
el uso dom�stico y tradicional de la herbolaria curativa y sanadora que viven
en el municipio de Hopelch�n, el matrimonio formado por Don Benigno Dzul y Do�a
Edilberta Mart�n (+). En 2016, ambas personas fueron invitadas por la Dra.
Laura Huicochea, para realizar un reconocimiento e identificaci�n de plantas en
senderos y pasillos de la Unidad Campeche. Esta planta fue referida para la
anemia (debilidad o k�anil).
4.
�Mala madre� Kalanchoe pinnata
(Crassulaceae)
Jard�n Bot�nico ECOSUR-Campeche, 2018
Autora: Diana del Rosario Cahuich Campos
Herb�cea que crece en el jard�n bot�nico ubicado frente al
Edificio C de ECOSUR-Unidad Campeche. Este jard�n fue creado por la estudiante
de posgrado Lizbeth Rodr�guez, como parte de su proyecto de investigaci�n de
maestr�a sobre herbolaria usada por habitantes en la ciudad de San Francisco de
Campeche para atender afecciones bucodentales. Las personas entrevistadas en
esta investigaci�n se�alaron utilizar esta planta como un desinflamatorio de
las mucosas o en quistes orales.
5.
�Hamelia patens�
�reas verdes de ECOSUR-Campeche, 2016
Autora: Susana Ochoa Gaona
El X-k�an�n es un arbusto de hasta unos 3 m, perteneciente
a la familia del caf� (Rubiaceae). Es frecuente en zonas ruderales de los
tr�picos h�medos. Es una planta ornamental y medicinal. Sus flores son
visitadas por abejas meliponas y sus propiedades medicinales son contra
sangrado y ayuda en la cicatrizaci�n. Adem�s, se le atribuyen propiedades
antiinflamatorias, analg�sicas (contra dolores), febr�fugas y antif�ngicas.
Tambi�n es preferida como forraje por los caprinos. Es apreciada como
ornamental en muchos sitios. Naci� de manera espont�nea en el �rea verde que se
ubica frente al edificio C, ala derecha. En abril de 2015, la Dra. Susana Ochoa
la identific� y v�a correo electr�nico solicit� a toda la comunidad de ECOSUR
su cuidado y conservaci�n a fin de evitar tumbarlo cuando a alguien se le
ocurriera �limpiar� la maleza enfrente de los cub�culos.
6.
�Tecoma stans�
Alrededores de ECOSUR-Campeche, 2012
Autora: Susana Ochoa Gaona
Es un arbusto o arbolito conocido como tronador o k'an lool
(maya). Se siembra como cerca viva, para sombra, refugio de fauna y tambi�n es
ornamental. La ra�z se usa como suced�neo del l�pulo en la fabricaci�n de la
cerveza; como insecticida; su madera para art�culos torneados y carpinter�a. Su
uso medicinal es contra la anemia, �cido �rico, asma, inflamaci�n, dengue,
analg�sico, anti-amibiana, dolor de muelas, antipir�tico, s�filis, depurativo,
diabetes y enfermedades del coraz�n. Tambi�n es mel�fera.
7.
�Rana cabeza de pala (Tripion petasatu)�
Alrededores de ECOSUR-Campeche, 2015
Autor: Jos� Domingo C� Vizcarra
El �rea de distribuci�n de esta especie incluye: Guatemala
(Pet�n), Belice, el sur de M�xico y, probablemente, Honduras (alrededor del
Lago de Yojoa). Se ha reportado en varias localidades del estado de Campeche.
Su h�bitat preferido consiste en lugares con mucha humedad, por lo que es com�n
encontrarle en estanques temporales rodeados de vegetaci�n durante la �poca de
lluvia, la cual va de finales de mayo a agosto, sin embargo, esto es muy
variable. Es una especie nocturna. Restringe su actividad a la �poca de
lluvias. Durante el d�a se refugia en huecos de troncos, grietas entre la
madera o piedras. Se ha observado que como protecci�n ponen sus cabezas tapando
la entrada de los huecos en los que se refugian, haciendo muy dif�cil su
extracci�n (Lee, 1996; Obs. Pers.). Esta especie es importante ya que forma
parte del ecosistema. Su distribuci�n es medianamente restringida a Centroam�rica.
Por sus caracter�sticas, puede ser un buen indicador de la salud del
ecosistema. Actualmente no se realizan trabajos de aprovechamiento de esta
especie, pero de acuerdo a observaciones propias, es un organismo que atrae
fuertemente la atenci�n de las personas.
8.
�Liberando una cascabel (Crotalus simus)�
Alrededores de ECOSUR-Campeche, 2015
Autora: Mirna Isela Vallejo Nieto
La v�bora de cascabel (Crotalus simus) es un animal
venenoso y su mordedura puede ser mortal para el ser humano, sin embargo, solo
atacan para defenderse. No son plagas, sino depredadores especializados y su
abundancia en la naturaleza depende directamente de la disponibilidad de sus
presas. Una v�bora cascabel en su etapa adulta, suele exceder los 130 cm de
longitud. Los s�ntomas que puede generar la mordedura de esta serpiente son:
dolor, hinchaz�n masiva, formaci�n de ampollas y necrosis.
En marzo de 2015, la serpiente de la imagen se encontraba atorada
en la rejilla de una coladera cercana al �rea del comedor. El personal de vigilancia
la atrap� y la meti� en un bote de basura con tapa donde se mantuvo toda la
noche. Al d�a siguiente notificaron al Dr. Rafael Reyna, quien tom� el bote con
la serpiente y, en compa��a de uno de los vigilantes, se traslad� caminando al
terreno que se ubica en la parte trasera de la caseta de vigilancia (filtro 1)
con la finalidad de soltarla. Coincidimos en el camino y tras compartirme lo
que har�an, corr� a buscar una c�mara y los acompa��. Ya en el lugar, con
cierta expectaci�n y temor, el Dr. Rafa recost� lentamente el bote en el suelo,
lo destap� y a su se�al, r�pidamente nos alejamos a cierta distancia para
esperar que el animal saliera. Hab�a un gran silencio. Se escuchaba con
claridad el sonido del cascabel, pero la serpiente no sal�a. Despu�s de un
rato, el doctor se acerc� y con ayuda de un gancho herpetol�gico sacudi� el
bote para animar a la v�bora a salir. Nuevamente son� el cascabel. Tras unos
minutos, vimos moverse de manera sigilosa un hermoso esp�cimen. Se detiene un
momento y despu�s, con gran rapidez, se arrastra entre la hojarasca hasta
perderse. Misi�n cumplida. Recogemos el bote y, en silencio, caminamos el
sendero de regreso. Yo, con la emoci�n a flor de piel por haber participado en
liberar un animal. El Dr. Rafa, con el coraz�n contento, pero con la seriedad
que da la conciencia de saber el peligro al que estuvo expuesto.
9.
�El amanecer del p�jaro toh� (Eumomota
superciliosa)
Costado de la caseta de vigilancia de ECOSUR-Campeche, 2013
Autor: Efra�n Aguirre Cort�s
El p�jaro toh es un ave representativa de la Pen�nsula de Yucat�n.
Aunque no tenemos ninguna especie end�mica, es importante porque se encuentra
en la mayor�a de las comunidades humanas ya que, por lo general, vive en
h�bitats bastante abiertos como bordes de selvas, bosques ribere�os y
matorrales. Es m�s conspicuo que los dem�s momotos y frecuentemente se posa en
alambres y cercas. Se agacha en mallas o cables telef�nicos moviendo su cola de
un lado al otro. Ah� busca presas como insectos y peque�os reptiles,
aliment�ndose tambi�n de frutas.
10.
�El vigilante arbor�cola�. Puercoesp�n
arbor�cola (Coendou mexicanus)
Costado de la caseta de vigilancia, ECOSUR-Campeche, 2013
Autor: Jos� Domingo C�
Vizcarra
Especie de h�bitos arb�reos. Su dependencia a los bosques
tropicales, su estatus de especie amenazada, as� como la falta de conocimiento
sobre el estado actual de sus poblaciones, son caracter�sticas que hacen que Coendou mexicanus
sea una especie prioritaria para su conservaci�n. Es una especie herb�vora que
se alimenta de frutas, semillas, plantas ep�fitas, cortezas blandas, cambium,
hojas y tallos tiernos, preferentemente de los g�neros Inga, Cecropia, Ficus y Brosimum.
Es considerada una especie rara ya que se han colectado pocos
ejemplares y esto seguramente es debido a sus h�bitos arb�reos y nocturnos.
Extra�amente, todos los ejemplares de museo provienen de atropellamientos en
Campeche, espec�ficamente de la carretera Champot�n-Campeche. En ECOSUR, nosotros
tenemos orgullosamente esta especie, que frecuentemente visita los �rboles de
los alrededores a la unidad y, en ocasiones, tambi�n vigila el paso de los
veh�culos y a las personas cerca de la caseta de vigilancia.
11.
�B�ho intoxicado�. B�ho cornudo (Bubo virginianus)�
Camino de ECOSUR a Chulbac, 2014
Autor: Jos� Domingo C�
Vizcarra
El b�ho cornudo es el b�ho m�s grande en la Pen�nsula de Yucat�n.
Se alimenta de una gran diversidad de seres vivos, pero los mam�feros son la
base de su dieta. Algunas de las presas registradas como su alimento son:
conejos, ratones, coat�es, zorrillos, tlacuaches y
diferentes especies de aves, reptiles e insectos.
En la foto, se observa que el b�ho estaba en el suelo, lo cual es
raro porque no ten�a presa alguna y, generalmente, acostumbra
acecharlas desde lo alto de los �rboles. M�s raro fue que durante toda la noche
y al d�a siguiente permaneciera en el mismo lugar. Fue entonces que decidimos
atraparla. No se resisti�, otro signo raro; puesto que al ser un ave rapaz se esperaba
que se defendiera ferozmente. En el Laboratorio de Fauna se tuvo en observaci�n
un d�a m�s y se intent� alimentarle con pechuga de pollo, pero no reaccion�.
Nuestro colega, el Dr. Manuel Weber indic� que por su
iris dilatado, su mirada y su comportamiento el ave estaba intoxicada.
Transcurri� un d�a m�s y muri�. Fue disecado y actualmente se tiene como un
ejemplar para educaci�n ambiental, con el cual promovemos se evite el uso de
productos como raticidas en �reas abiertas puesto que no sabemos qu� o quien
pueda terminar intoxicado con ellos.
12.
�Una belleza en la oscuridad�. La tar�ntula
veracruzana (Brachypelma kahlenbergi)�
�reas verdes a espaldas del Edificio C, ECOSUR-Campeche, 2013
Autor: Jos� Domingo C�
Vizcarra
El orden Araneae es el s�ptimo en
diversidad total de especies respecto al resto de diversidad de organismos y
hasta la fecha se han descrito m�s de 46,500 especies de ara�as. El grupo est�
abundantemente representado en todos los continentes, excepto en la Ant�rtida.
Generalmente solitarias, todas son depredadoras de peque�os animales. Tienen
gl�ndulas venenosas en los quel�ceros, con las que paralizan a sus presas.
Producen seda, con la que tejen telas de ara�a o telara�as que usan para
construir redes de caza, tapizar refugios e incluso hacerse llevar por el
viento.
La especie de esta foto, Brachypela
kahlenbergi fue descrita en el 2008 por el alem�n
Jan-Peter Rudloff con base en individuos de Veracruz.
Sin embargo, no se conoce la distribuci�n de la especie. Tampoco se tiene mayor informaci�n de ella, as� que quiz�s tengamos una nueva
especie en casa. Si alguien la encuentra rep�rtela a �Naturalist, puesto que no
est� registrada oficialmente en la Pen�nsula de Yucat�n, aunque hay fotos para
Quintana Roo que est�n en revisi�n.
13.
�Escondite del murci�lago orej�n brasile�o�
(Micronycteris microtis)
Alcantarilla ubicada bajo el tanque de agua de ECOSUR-Campeche,
2013
Autor: Tammy E. Chi Coyoc
Este peque�o mam�fero volador fue conocido por primera vez en
Brasil, cerca de cuerpos de agua. Sin embargo, se distribuye desde Argentina
hasta el Centro de M�xico. Era de esperarse que el sitio id�neo para formar su
h�bitat en ECOSUR fuera donde pasa el agua de lluvia, es decir, las
alcantarillas. Los individuos de esta especie se alimentan de insectos,
particularmente de grillos. A pesar de ser una especie de amplia distribuci�n,
se tiene poca informaci�n biol�gica sobre ella.