Mirando al sur
En el municipio Oth—n P. Blanco,
Quintana Roo, ni–as y ni–os integran el grupo m‡s vulnerable a la explotaci—n
laboral (en la frontera con Belice) y sexual (en la zona tur’stica de
Majahual). Trabajadoras y trabajadores ca–eros ven afectados sus derechos de
atenci—n a la salud, al empleo y salario digno. Pertenecer a grupos ind’genas
exacerba la explotaci—n.
Calakmul, Campeche, presenta tres
problem‡ticas: Ricardo Flores Mag—n, con poblaci—n mayoritaria ind’gena en
situaci—n de vulnerabilidad y con embarazos a temprana edad; Xpujil, con
suicidios entre j—venes; R’o Hondo, con inseguridad por abigeato (robo de
animales), aislamiento geogr‡fico de la poblaci—n ind’gena y falta de servicios
b‡sicos.
La zona de colindancia con Guatemala
del municipio de Tenosique, Tabasco, referida como corredor migratorio, es de
los puntos m‡s vulnerables, igual que la v’a del tren que conecta con Palenque.
Se considera que ni–as y ni–os migrantes son los m‡s vulnerables a todo tipo de
explotaciones.
Los municipios chiapanecos de
Cacahoat‡n, Uni—n Ju‡rez, Tuxtla Chico, Frontera Hidalgo, Metapa, Suchiate y
Tapachula se caracterizan por un flujo migratorio masivo, en el que mujeres,
j—venes e infantes en tr‡nsito son v’ctimas de violencia extrema, sobre todo
sexual. Otros grupos vulnerables son personas con VIH y poblaciones LGBTTTI.
Fuente: Memoria del Primer encuentro
intermunicipal sobre derechos humanos y vulnerabilidad social en la frontera
sur, 2016: http://bibliotecasibe.ecosur.mx/sibe/book/36735)